martes, 5 de febrero de 2013

Eligiendo el mejor sistema para aromatizar




El aroma despierta nuestros sentidos, nos traslada a lugares, nos recuerda a personas… cuando de nuestro hogar se trata, queremos que huela bien, buscamos la fragancia con la que nos sentimos identificados y deseamos que al abrir la puerta nos invada la sensación de haber regresado a casa. Muchas veces no sabemos cómo lograr esto, probando perfumes en todos los formatos. Aquí te damos una ayuda para elegir el sistema que mejor se adecue a tus necesidades.

Hornillos: Consisten en un recipiente donde se coloca agua con unas gotas de esencia y por debajo del mismo una fuente de calor que evapora el líquido para que aromatice el lugar. Los hornillos comunes utilizan como fuente de calor velitas y los eléctricos una lamparita o resistencia. Los hornillos en general, tienen la ventaja de permitir regular la intensidad del aroma y personalizar el mismo. La intensidad la regulamos colocando mayor o menor cantidad de esencia y, en el caso de los hornillos con lamparita, con los watts de la misma (a mayor calor, más rápido evapora el líquido y más intenso el aroma). La fragancia puede personalizarse colocando gotas mezcladas de esencias que nos gusten creando aromas que no logramos conseguir en el mercado. La mayor desventaja de este método es que si uno es olvidadizo y no controla que haya suficiente líquido mientras la fuente de calor esté encendida, puede quebrarse el recipiente contenedor, además suelen ser muy frágiles y hay que tratarlos con cuidado.
En particular, los hornillos con velita tienen la ventaja de que no requieren un enchufe cerca y su luminosidad genera calidez en el ambiente, pero suelen precisar la misma atención de cualquier otro elemento que utilice fuego para evitar accidentes, sobre todo si hay mascotas o niños pequeños en la casa. En los hornillos con lamparita hay que evitar que el agua se derrame sobre la lámpara para evitar cortocircuitos o que explote el vidrio por los cambios de calor. Su mayor ventaja es la duración del aroma, ya que al ser más suave el calor que genera demora más en evaporar el líquido. Finalmente, los hornillos a resistencia, tienen la gran ventaja de que duran aún más que los eléctricos y que no hay que tener grandes precauciones ya que está preparado para el contacto con el líquido.
Muchas de las precauciones mencionadas se pueden solucionar si utilizamos en lugar de esencia diluida en agua, directamente una esencia sólida. También existen hornillos de materiales resistentes al fuego que pueden emplearse sin agua.

Difusores con varillas: un método relativamente nuevo de aromatizar ambientes cuya mayor ventaja reside en su practicidad ya que no requiere una gran inversión de tiempo. Únicamente se colocan las varillas en el recipiente contenedor del aroma y las mismas absorben la esencia, la cual al contactar con el calor del ambiente se evapora y emite un agradable aroma. Sin embargo, su duración y eficiencia dependerá del calor y la ventilación que haya en el ambiente, lo que no lo hace apto para cualquier lugar: en sitios muy grandes y fríos emite poco aroma, mientras que en lugares cerrados y cálidos como un toilette es más eficiente. 


Velas: un clásico que brinda calidez al ambiente y lo decora. Los hay de varios colores, tamaños y formas. Como desventajas, por un lado hay que ser precavido con el fuego y por otro hay que tener en cuenta que el tamaño de la vela influye en la intensidad del aroma: velas chicas sirven para ambientes chicos y en ambientes grandes hay que colocar velas grandes que suelen ser caras. Es difícil conseguir velas buenas, que quemen hacia dentro y se consuman hasta el final dejando buen aroma mientras de consumen. Un truquito muy útil es encender la vela y esperar hasta que se haya derretido un poco, con mucho cuidado vertemos unas gotitas de esencia de hornillo sobre la cera y eso aumentará el aroma que genera.

Desodorantes: existen desodorantes en aerosol y con pulverizador. Ambos son un método práctico y rápido de usar pero de poca duración. Los desodorantes en aerosol tienen la desventaja de que al ser realizados industrialmente no suelen tener gran variedad de fragancias y las mismas (por los componentes que emplean) no se asemejan a las naturales. En el caso de los desodorantes computarizados (aquellos que por medio de un temporizador emiten un disparo cada vez que se lo programe) permiten mantener el aroma de manera continuada. Los pulverizadores suelen usarse tanto en el ambiente como en la ropa y el aroma es más natural.

Inciensos: otro de los clásicos que suma puntos por su trayectoria. Su ventaja es el misticismo que rodea al uso, casi un ritual (ver nota…) pero su corta duración y el humo que genera no apto para todo el mundo, sobre todo los niños y personas alérgicas o asmáticas, es su gran desventaja. 

Aros difusores: Un método poco conocido que consiste en un aro de cerámica o algodón prensado que se coloca en el portalámparas y se humedece con esencia que el calor de la luz evaporará. Su mayor desventaja es que las lámparas actuales suelen ser de bajo consumo y no generan calor suficiente para que sea efectivo. 

¿Ya elegiste la mejor opción para tu casa o lugar de trabajo? Podes combinar dos o más métodos e incluso mezclar aromas. Por ejemplo: un difusor en el living si este es grande para mantener un aroma suave, un hornillo eléctrico que refuerce la fragancia y pulverizar cortinas y sillones para que sea más intenso aún.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Queremos conocer tu opinion